Imagina que hasta ahora el arte era como un estudio de grabación: todo se hacía en un interior, bajo luces controladas, buscando la perfección, la pose perfecta y un sonido impecable. El Impresionismo (aprox. 1874-1886) fue el movimiento que cogió los micrófonos, salió a la calle y decidió grabar un concierto en directo. No buscaban la perfección, sino capturar la energía del momento, el ruido de la vida y, sobre todo, la luz real del sol.
Los impresionistas fueron un grupo de jóvenes artistas rebeldes en París que se cansaron de las reglas estrictas de la Academia de Bellas Artes. La Academia decía que el arte debía ser serio, pintar temas históricos o mitológicos con un acabado perfecto y pulido donde no se viera ni una pincelada. Los impresionistas hicieron exactamente lo contrario.

El Mundo Estaba Cambiando, y el Arte También
El Impresionismo no nació en el vacío. Fue el resultado de un mundo en plena aceleración:
- La Invención de la FOTOGRAFÍA: ¡Esta es la clave de todo! A mediados del siglo XIX, la fotografía se popularizó. De repente, una máquina podía capturar la realidad de forma perfecta en segundos. Muchos artistas se preguntaron: «¿Qué sentido tiene pasar meses intentando copiar la realidad si una cámara lo hace mejor?». La respuesta que encontraron fue genial: «Si el arte ya no tiene que ser un espejo perfecto de la realidad, entonces puede ser el espejo de la PERCEPCIÓN«. Ya no pintarán el objeto, sino cómo el ojo ve el objeto en un instante fugaz.
- ¡Pintura en Tubo!: Un pequeño invento lo cambió todo. Hasta entonces, los pigmentos se mezclaban a mano en el estudio, un proceso lento y engorroso. La invención de los tubos de pintura al óleo permitió a los artistas sacar sus caballetes a la calle y pintar al aire libre (au plein air).
- La Vida Moderna: París se había transformado en una ciudad moderna, con trenes, cafés, bulevares llenos de gente y lugares de ocio. Los impresionistas le dieron la espalda a los dioses y héroes antiguos y empezaron a pintar la vida moderna que veían a su alrededor.

El Escándalo que les Dio un Nombre
Rechazados por el Salón oficial de París (la exposición de arte más importante), estos rebeldes organizaron su propia exposición en 1874. Un crítico de arte, para burlarse de un cuadro de Claude Monet llamado Impresión, sol naciente, los llamó despectivamente «los pintores de las impresiones», como si dijera que sus cuadros no eran obras terminadas, sino simples bocetos o «impresiones».
¡A los artistas les encantó el nombre y lo adoptaron con orgullo! Acababa de nacer el Impresionismo.

Las «Nuevas Reglas» de la Pintura Impresionista
| Arte Académico (Lo Antiguo) | Arte Impresionista (La Revolución) |
| Tema: Historia, mitología, retratos importantes. | Tema: La vida moderna, paisajes, gente corriente. |
| Lugar: Se pinta en el estudio, con luz artificial. | Lugar: Se pinta al aire libre (au plein air). |
| Objetivo: Un acabado perfecto, pulido, que oculte la técnica. | Objetivo: Capturar la impresión fugaz, el instante. |
| Técnica: Pinceladas invisibles, colores mezclados en la paleta. | Técnica: Pinceladas cortas, rápidas y visibles. El color se mezcla en el ojo. |
| Luz: Luz idealizada y controlada. | Luz: LA LUZ es la verdadera protagonista. |
| Sombra: Las sombras se pintan con negro. | Sombra: ¡PROHIBIDO EL NEGRO! Las sombras tienen color (violetas, azules). |

Los Tres Grandes Protagonistas (aunque eran muchos más)
Édouard Manet (El Pionero Escandaloso)
- Quién era: Considerado a menudo el padre del Impresionismo, aunque él mismo nunca se unió al grupo oficialmente y siempre quiso exponer en los salones «tradicionales». Rompió con las reglas antes que nadie.
- Su Estilo: Escandalizó al público con temas de la vida moderna y la burguesía. Le gustaba aplicar los colores de forma muy plana, sin casi volumen (inspirado en la estampa japonesa). No le interesaba la mezcla óptica como a Monet, sino el contraste audaz entre las grandes manchas de color y la pincelada suelta.
- Obras Clave:
- Almuerzo sobre la hierba: Desafió todas las convenciones al pintar a dos hombres vestidos conversando con dos mujeres desnudas, mirando directamente al espectador. El realismo del desnudo, que no era mitológico sino «moderno», fue un choque cultural.
- Olimpia: Otro desnudo frontal, directo, que indignó por la descarada mirada de la modelo, que era claramente una prostituta. Manet nos fuerza a ver la vida moderna tal cual, sin filtros.

Claude Monet (El «Ojo» del Impresionismo Puro)
- Quién era: El líder indiscutible y el más puro de los impresionistas. Estaba obsesionado con una sola cosa: capturar la luz y el paso del tiempo.
- Su Estilo: Monet decía que quería pintar «lo que hay entre el objeto y yo», es decir, el aire, la luz, la atmósfera. Para demostrar que la luz lo cambia todo, pintó series del mismo objeto a diferentes horas del día y en diferentes estaciones.
- Obras Clave:
- La serie de la Catedral de Ruán: Pintó la misma fachada decenas de veces para demostrar que el edificio no es gris, sino que puede ser azul por la mañana, dorado al mediodía y violeta al atardecer. No pinta la catedral, pinta el tiempo que pasa sobre la catedral.
- Nenúfares: En su etapa final, pintó obsesivamente su estanque de Giverny, disolviendo casi por completo las formas en un mar de color y luz.

Pierre-Auguste Renoir (El Pintor de la Alegría de Vivir)
- Quién era: El optimista del grupo. Si a Monet le interesaba la luz sobre el paisaje, a Renoir le interesaba la luz sobre las personas, capturando momentos de felicidad y ocio.
- Su Estilo: Su pincelada es más suave y fluida que la de Monet. Sus temas son bailes, meriendas en el campo, retratos de niños… Le encanta pintar cómo la luz del sol se filtra a través de las hojas de los árboles y crea manchas de color sobre la ropa y la piel de la gente.
- Obras Clave: Baile en el Moulin de la Galette. Es la personificación de la alegría de vivir. No es un retrato formal; es la captura de la atmósfera vibrante de un domingo por la tarde en París, con la gente bailando, riendo y flirteando.

Edgar Degas (El «Impresionista» que Odiaba el Paisaje)
- Quién era: Un personaje único. Aunque exponía con los impresionistas, se sentía un realista. Odiaba pintar al aire libre y prefería los interiores iluminados con luz artificial (teatros, cafés, carreras de caballos).
- Su Estilo: ¡Era el fotógrafo del grupo! Sus composiciones son increíblemente modernas. Utiliza encuadres audaces, como los de una instantánea fotográfica: corta a las figuras por los bordes, usa puntos de vista extraños (desde arriba o desde abajo) y captura gestos espontáneos, no poses.
- Obras Clave: La clase de danza. En lugar de pintar a las bailarinas en el escenario, Degas nos muestra el «detrás de las cámaras»: el momento del ensayo, con una joven ajustándose la zapatilla, otra rascándose la espalda… Es una visión realista y nada idealizada del mundo del ballet.

Joaquín Sorolla (La Luz Mediterránea y Española)
- Quién era: Aunque es posterior a los impresionistas «fundadores» y se le clasifica como luminista o «impresionista español», Sorolla es el artista que mejor comprendió y aplicó la obsesión impresionista por la luz, adaptándola al clima y los temas de España. Nunca perteneció al grupo original francés, pero su trabajo es muy cercano a ellos.
- Su Estilo: Maestro absoluto en capturar la luz del Mediterráneo: brillante, intensa y con un contraste fortísimo. Su pincelada es suelta y rápida, llena de color. Sus temas favoritos eran la playa, el mar, los niños bañándose y los retratos al aire libre, con el sol creando grandes manchas de color y brillos en el agua y la piel.
- Obras Clave:
- Paseo a orillas del mar: Una de sus obras más icónicas. La luz cegadora del sol, las figuras moviéndose y el tratamiento de los blancos de los vestidos (llenos de sombras azuladas y violetas, como hacían los impresionistas) capturan un momento efímero de felicidad y brisa marina.
- Niños en la playa: Muestra a varios niños jugando desnudos en la arena, con la luz del sol reflejándose en el agua y la arena húmeda. El manejo de la luz en la piel y los reflejos es magistral.

Conclusión: La Puerta al Arte Moderno
El Impresionismo fue una bomba. Duró apenas 12 años como movimiento cohesionado, pero su impacto fue total. Al romper con la necesidad de copiar la realidad, demostraron que un cuadro podía ser sobre la pintura misma: sobre el color, la luz y la percepción.
Abrieron la puerta por la que se colarían todos los artistas que vinieron después, desde Van Gogh hasta Picasso. Sin la liberación que supuso el Impresionismo, todo el arte del siglo XX habría sido impensable.
Actividad propuesta: Paisaje impresionista con plastilina
Vamos a tratar de imitar una de las tres obras de Monet:



¿Qué vamos a necesitar?
- Una cartulina A4 de cualquier color
- Plastilina de colores. Es preferible un paquete de esos que llevan poca plastilina, pero de muchos colores. Si sólo encontráis bloques grandes, podéis comprarlos entre varios y compartirlos, porque utilizaremos poca cantidad.


